viernes, septiembre 14

el ulitmo tic tac

Su vos es como un tic-tac en mi cabeza a punto de estallar, mi espalda irgue completamente, mi mirada no puede olvidarse de la presa, y se clava en ella como una daga, puedo sentir como va formando parte de mi, como recorre mis venas como un veneno que no espera la hora para consumirme en sus efectos, va juntando los pedazos de mi corazón recién destrozados. El pecho empieza a doler como si pequeños alfileres fueran entrando tratando de cumplir su labor, tratando de sostener la tela que me protege, mas ya esta totalmente rasgada. La respiración es lenta y difícil, bajo su poder inclino la cabeza hacia un lado y hacia el otro, estirando cada músculo, el tic tac se acelera y mi mirada no ha perdido su punto, el enemigo ha cambiado, es aquel que ame, amo y amare, con una lagrima en mis mejillas, mientras trata de justificar su error, de explicar el porque su cuerpo esta unido a otro que no es el mío he clavado una bala en medio de su frente, en mis brazos cae su cuerpo ensangrentado, asesinado por mis manos, por aquellas manos que tantas veces su cabello acariciaron, por esas mismas manos que minutos después con una navaja mi dolor han acabo, así mi ultima exhalación llega con el ultimo tic – tac, del reloj.