Me huele a café, a tortillas recién palmeadas
me huele a su abrazo y;
cuando en dos días he olvidado llamarla,
a sus reproches,
Tiene cabellos plateados,
acostumbrada a que su voluntad se haga,
piel delicada,
las manos,
recuerdan el paso de los años.
Sus dedos, deslizándose suavemente
forman una cruz en mi frente,
es su bendición, señal del gran amor
Cuánto se enoja!
cuando digo algo estúpidamente diferente a lo cree,
cuando entre sonrisas le menciono
que en mi piel quedará escrito su nombre
Como la extraño!
una botella me recuerda que pronto estaré con ella
que brindaremos, y en un abrazo;
chocaremos nuestros caballitos rebosantes,
por los consejos, por las nuevas oportunidades.
.
mmm Me huele a café!
al suave aroma de su cariño,
que hoy está lejos,
porque el amor que le tengo.
CICLOS RÁPIDOS DE CAMBIO EMOCIONAL EN UN TLP
Hace 13 años.