conversatorio 1

Tum tum tum, es la música que escuchan mis oídos, mezclados perfectamente con el ruido de los carros, y el susurro del viento,

En medio de un día perfecto, hermosamente soleado, cargado de luz
la gente aplaude y habla - como te sonríe la suerte en esta tarde de viernes.

Pero lo único cierto es que por dentro el caballo cabalga lento; en medio de las pesadas arenas del desierto, la sed es agobiante, es vivir en mundos paralelos

De nuevo suena el tum tun tum, y mi cerebro se va perdiendo, lleva gemidos por dentro,
¿por qué? gritan muchos, si tu mundo es perfecto
pues, brindemos por eso.

De qué te quejas, grita el muerto. No lo sé, responde el de adentro, brindemos por lo incierto.

Una lágrima quisiera brotar, pero el brindis la puede parar.

Las voces se apagan, sírvame otro; señor del bar. Hasta él cree que son inmortal. No hay medicina que pueda callar esta ansiedad, pero si gota a gota la hace silenciar,  por favor; otra ronda más.

No, todavía no he empezado a delirar, por que vos y él no son delirio; sino parte de mi otra mitad.

Hablemos como solíamos hablar, hablemos del cielo y del infierno, de la montaña y el mar, dejame volver a dominar.

De nuevo el tum tun tum y el cerebro empieza a desacelerar,
esta vez no quiere la navaja, alza su mirada, desea matar, sed de sangre, de hacer pagar, su voz ronqueta clama. NO QUIERO A NADIE MÁS. Solo nosotros tres, es hora de avanzar, si no funciona te vuelves a suicidar.

2019