Ahhhhh! es perfecto como el humo va cegando mis ojos y va nublando mi mente, como sus siluetas me llevan a olvidarlo todo, los sonidos se alejan dejando una suave y tierna melodía; que calma el dolor de mis heridas.
A la par del cenicero, el teléfono empieza a vibrar, no puedo dejar de mirarlo, ni tampoco puedo contestar, es mi madre, moriría y volvería a vivir para de nuevo morir si me viera así.
Me pregunto ¿qué me llevo a regresar? ¿Qué me hizo volver hacía atrás? ¿Qué acabo con mi esperanza? ¿Con qué cara me voy a levantar mañana?
26-02-09
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